Mejorar la calidad del aire interior
La reciente pandemia ha evidenciado innumerables retos. Pero también nos ha ofrecido la oportunidad de reflexionar y revisar la salubridad de nuestros ambientes interiores.
INTERIORES MAS SALUDABLES
No hace falta decir que la calidad del aire que respiramos ha tomado una gran relevancia durante los últimos dos años. Al pasar un 90% del tiempo en espacios interiores_ y al respirar cada uno de nosotros a lo largo de todos los días, la importancia de la calidad del aire interior no puede ser más evidente.
Por qué son importantes los edificios saludables
Las pruebas sobre el impacto de los ambientes interiores en los usuarios de los edificios son sólidas y sustanciales: los edificios pueden ser saludables o insalubres, e influirán en todo, desde la salud física y mental hasta la productividad, el rendimiento y la retención del personal.
Un edificio "insalubre" puede provocar enfermedades. Los síntomas del síndrome del edificio enfermo pueden atribuirse a una serie de factores presentes en un determinado edificio, entre los que se encuentran los contaminantes químicos debidos a la combustión u otras fuentes interiores, los metales pesados, los contaminantes biológicos, la radiación electromagnética, la ventilación inadecuada, la mala iluminación, la ausencia de luz solar, la humedad, la temperatura y el ruido, así como un diseño deficiente de la oficina o la ergonomía.
La calidad del aire interior
Aunque los factores enumerados como posibles causas del síndrome del edificio enfermo son muchos y variados, una proporción significativa de los presuntos irritantes se transmite por el aire. Las personas que padecen afecciones respiratorias, sobre todo el asma, son las que corren mayor riesgo de verse afectadas por ellos. En la práctica, esto podría parecerse a los alumnos de una escuela que rinden menos debido a que faltan a clase, les falta energía y les cuesta concentrarse.
En el lugar de trabajo, una IAQ (calidad de aire interior) deficiente puede provocar una reducción de la productividad, un mayor riesgo de errores y una menor satisfacción general en el trabajo, a la vez que en los entornos que acogen a personas vulnerables o que padecen problemas de salud, una atención inadecuada a la IAQ puede aumentar el riesgo de infecciones transmitidas por el aire y de enfermedades respiratorias.
"Un edificio debe crecer con el usuario y ser capaz de adaptarse a sus necesidades, es decir, ir más allá. Debe inspirar y permitir a las personas prosperar, no sólo sobrevivir. La IAQ es una pieza clave en este encaje y los arquitectos confían en la industria de pavimentos para que les proporcione una gama saludable de opciones más ecológicas que a la vez cumplan con los requisitos de diseño y funcionalidad igual que los productos convencionales."
Ben Channon, arquitecto, director de Ekkist y autor de ’Happy By Design‘
Es responsabilidad conjunta de todas las partes implicadas en el sector de la edificación y la construcción desempeñar su papel en la creación de edificios que funcionen para nuestro medio ambiente y también para las personas. Los diseñadores y prescriptores pueden desempeñan un papel importante a la hora de limitar la exposición de las personas a materiales peligrosos con ser más exigentes en la elección de sus productos.
Por parte de los fabricantes, unas declaraciones de producto completas y exhaustivas que revelen los ingredientes de los materiales y su toxicidad a lo largo del ciclo de vida del producto son recursos importantes que muestran el panorama general de toxicidad a lo largo del ciclo de vida, incluyendo la instalación y el mantenimiento.
Forbo Flooring, por ejemplo, no sólo ofrece una DAP para cada uno de sus productos, sino que también proporciona declaraciones sobre el impacto de sus pavimentos en la toxicidad humana y medioambiental, conocidas como Declaraciones Sanitarias de Producto (HPD).
Saber mas sobre la importancia de interiores saludables en nuestro ultimo informe.
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